Además, hoy tuve un cumple de una chica que ni me va ni me viene. El caso es que no ha invitado a una chica que el año pasado eran INSEPARABLES.Yo me quedé como: Pero quilla, tu que me estás diciendo. Me tomas el pelo. Le he regalado un libro y ya. Lo mejor del cumpleaños *que quede claro que esto no me suele pasar*, es cuando María y yo salimos a tomar el aire. Bueno, estaba yo hablando con María sobre N y de repente digo: Oh, my god. Venía un chico por detrás. No sé que pasó, pero de repente me sentí atraída hacía él como sí fuéramos imanes. A María le pasó lo mismo. Algo pasó, no sé el que, pero ese chico y yo nos miramos y PLAS. Ahí me empecé a parecer a un imán. A María le entró una especie de ataque de ansiedad y entramos para dentro medio minuto y cuando salimos ya no estaba. Aún así, sigo prefiriendo a mi N. El móvil se me ha rompido y mañana me compraré uno nuevo (exactamente igual) porque el mío no tiene arreglo :( Por cierto, estoy escribiendo una historia nueva (porque con la otra me quedé un poco atascada) y tengo planes de acabarla este verano. Cuando la acabe pues la colgaré en un blog para no ir con prisas y todas esas cosas tan repugnantes.
También me he pensado como en escribirle una especie de carta a N, a ordenador (para que no se note mi letra) y meterla en su buzón, porque vive súper cerca mío. Además así, como que me invadirá un halo de misterio irresistible. Por cierto, hoy me ha mirado 8 veces! ^^
¿Cuentas las veces que te mira? Pensaba que eran paranoias mías, jajajajja.
ResponderEliminarA mí también me pasó algo parecido a lo del chico misterioso con uno de un aeropuerto que no conocía de nada. Fueron unos segundos muy bonitos...
Besos, Amanda.
Ocho, exacto aishh.
Eliminar¿En serio? JAJAJAJAJJAJAJAJA. No sé lo que pasó, pero si lo vuelvo a ver volverá a pasar. LOOL
Me encanta esta entrada LLL es una de mis favoritas del blog. Besoa para ti y tu blog, Laura! :)
ResponderEliminarGracias ^^
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